Reseña: La hija de la noche

La hija de la noche

Laura Gallego

Edebe, 2004

196 páginas

Sinopsis encontrada en el libro

“La tranquilidad del pequeño pueblo de Beaufort se ve alterada por un hecho que, en principio, parece carecer de una explicación razonable. El granjero Henri Morillon ha encontrado muerta una de sus vacas en extrañas circunstancias: completamente desangrada.

            Algunos habitantes del pueblo, como el joven Jerôme, creen que la mansión Grisard guarda cierta relación con el suceso. El viejo caserón había permanecido deshabitado y abandonado durante muchos años, hasta que derepente se instala allí la bella y enigmática Isabelle, que regresa a la localidad que la vio nacer y de donde huyó tiempo atrás.

            El misterio que rodea a esta mujer despertará las sospechas de sus vecinos, y gendarme del lugar, el joven Max, comienza a investigar…”

El entrar a un libro a la defensiva no es un movimiento muy inteligente. Había algo en este libro que no me cuadraba. Desde una cita de Coelho y la marca de “9A” de su antiguo dueño no prometía mucho. Además, prometiendo ser una historia de vampiros cliché y sobreusada no quise esperar mucho de libro. Las primeras páginas reforzaron mi postura: los personajes construyéndose en mi cara en un solo párrafo, como si de novela clásica se tratase, plagada de adjetivos y gerundios floripepeando la narración… en fin, alejada completamente de mis gustos. Pero en algo me equivocaba: era justo el estilo que necesitaba la narración. Aquel estilo decoradísimo coincidía con los personajes, preocupados, la gran mayoría, sobretodo secundarios, por los chismes, por su apariencia frente a los otros, exagerando las situaciones y esparciendo el caos y el terror por sobre el pueblo.

            Sí, el hecho de la existencia de un vampiro en el pueblo era obvio, si los personajes no hubiesen estado puestos en el lugar perfecto perdido de toda interacción con el resto del mundo seguro hubiesen, al menos, sospechado de una criatura de tal estilo, pero lo que sorprendió fue el manejo del tema. Laura Gallego logró mover el foco del libro hacia los personajes, las relaciones, la historia del pueblo, logró, con tan pocas páginas, concebir una sensación de veracidad, de que Beaufort en realidad existe y fue asolado por una criatura chupasangre muchos años atrás.

¿Lo recomiendo?

Si quieren una lectura fácil y amena este libro es perfecto. También encontrarán en el una visión nueva sobre los vampiros, el amor, el funcionamiento de “pueblo chiquito boca grande” y algún que otro niño inquieto.